yoestoyamiaire
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Qué bonita es la navidad...
1. Con sus calles cubiertas de nieve (y los burgaleses sin poder ir a trabajar)
2. Sus regalos al pie del árbol (y El Corte Inglés haciendo su "agosto", qué paradoja)
3. Sus villancicos horteras (sólo se salva Last Christmas de Wham, una pasada de canción)
4. Sus campañas de recogida de juguetes y de operacion-kilo... un mes al año (que no hace daño)
5. Sus Papa-Noeles repartiendo piruletas a los niños y pidiendo dinero a los padres
6. Sus comilonas en las fiestas de guardar para después esperarte en la cuesta de enero
7. Su calvo de la lotería repartiendo ilusión (y los sintecho pasando frío en cualquier esquina)
8. Sus Nocheviejas de barra libre y amores efímeros
9. Su roscón dulce y sus felicitaciones aún más empalagosas
10. Lo peor: un largo etcétera...
Last Christmas, I gave you my heart
But the very next day, You gave it away
This year, to save me from tears
I'll give it to someone special
Parece que el año cuenta sus últimos días y yo soy incapaz de no echar la vista atrás. Puede que este 2004 termine donde empezó, se cierra el círculo para empezar uno nuevo pero... ¿qué ocurrió durante estos 12 meses?
Pues que aprendí. Mucho. Aprendí que cuando se ha querido a alguien es difícil olvidarle, pero me enseñaron que se puede querer a alguien por encima de todo y eso te hace sentir más vivo. Aprendí que puedo recorrer muchos kilómetros sólo por ver a una persona, aunque me enseñaron que los amigos de verdad están siempre y sea donde sea. Aprendí que, cuando crees en alguien, que te fallen es lo peor que te puede pasar, y al final me enseñaron que perdonar merece la pena. Aprendí que podría ir a Italia o al fin del mundo, pero me enseñaron que no podría hacerlo sola. Aprendí y me enseñaron a creer en mi misma.
Y hoy aprendí que nadie quita las hojas secas que fosilizan en el asfalto, porque el tiempo pasa demasiado rápido y nadie se entretiene en ello. El año que viene pasarán muchas cosas y sólo podré disfrutarlas en ese momento, pero lo que aprenda quedará para siempre.
Estoy haciendo un trabajo de Nutrición para la Universidad, y una de las partes de que consta es valorar las fuentes de información que tienen los adolescentes para saber cómo hay que comer (colegios, centro de salud, familia, televisión, etc.) Así que ayer, muy metida en mi personaje de "reportera más dicharachera", me fui a preguntar al centro de salud y a mi colegio qué es lo que hacían al respecto.
En el centro de salud me dijeron que ellos sólo informaban si las madres acudían al centro, es decir, que las familias que pasan de ir se quedan sin información nutricional para sus pobres niños malnutridos a base de bollos.
Y en el colegio (y es lo que me parece indignante!!!!) me dijeron que no podían perder tiempo de sus horas lectivas en enseñar a la gente a desayunar cuando tenían que dar a final de curso geología y no les daba tiempo ni para eso. Y yo me pregunto... si los padres pasan, los sanitarios no pueden hacer nada y los profesores no tienen tiempo... quién enseña a los niños a desayunar??? ¿Los anuncios de Kellog´s? ¿No es acaso mayor educación lo que deben aprender de la vida que cuatro minerales que llevan ahí miles de años metamorfoseando y no se han movido desde entonces?
Maleta, saco, neceser, toalla, gorro... De nuevo, me marcho. Lejos, pero no tanto. Siempre se me olvida algo, unas veces el saco, otras un mechero por si los imprevistos, la mayoría unos cuantos malos rollos, horarios y otras cosas varias.
Pido auxilio, besos y comida por teléfono... Ahora es el momento de volver a empezar, que empiece el Carnaval... Se cayeron mis alas y yo no me rendí, así que ven aquí... Brindemos que hoy es siempre todavía, que nunca me gustaron las despedidas...
Mucho reír, poco dormir. Y volver, a la vida, a lo de siempre, mis pequeñas cosas, los mareos (cervicales?? no sé, ay que miedo), las clases, mi clarinete, mis amigos y mis futuros proyectos.
Pero este fin de semana, viaje a ninguna parte, a la innovación del qué pasará, al recuerdo de la emoción de si llegaré al tren... que sale he quedado dentro de 20 minutos y ya estoy apurando!
Esta semana le dije a mi padre que cuando acabase la carrera (el año que viene o al siguiente), quería que me regalase una pluma buena como premio. Y me respondió: "Ya la tengo preparada. Es roja".
P.D.: Este es el Post nº 50!!!! Y ya vamos por los 130 comentarios, uf!
Estoy enchufada a la máquina de la amistad... pero creo que necesito el amor para vivir por mí misma. Y como los medicamentos, no vale cualquiera! No puede producir interacciones, debe ser un tratamiento personalizado, en la dosis exacta (ni más que me agobio, ni menos que no es suficiente).
Sin embargo, el haber sufrido la enfermedad del amor con secuelas y recurrencias, me hace pensar que un nuevo tratamiento (aún en investigación?) no sea tampoco la solución, al menos no a largo plazo. La polifarmacia es medida de urgencia, pero los fármacos interaccionan entre sí compitiendo, y yo al final me puedo volver loca (y ya lo que me faltaba!)
Así que el médico me ha recetado "Virgencita virgencita, que me quede como estoy", que es un dicho popular y a estas cosas siempre se les da crédito, que para eso son populares. Y que una vez por semana (viernes o sábado a poder ser) me haga una diálisis de malos rollos con la máquina de la amistad para así poder seguir viviendo.