- ¿De qué depende?
- Del destino, de mí misma... qué se yo.
- Todo lo que está en manos del tiempo a emplear, el amor, los reencuentros y las despedidas, aquel sueño robado...
- ... no valen nada si no se van cumpliendo pequeños objetivos poco a poco.
- La máscara quizá no sólo te permita ocultar las lágrimas... creo que tampoco te deja ver la realidad de los pequeños triunfos diarios.
- Pero me hace parecer fuerte, y eso es algo que sí puedo elegir.
- Puedes elegir si poner el remite en el sobre, puedes inventar nombres de personajes desconocidos, puedes crecer con la risa, puedes equivocarte una y mil veces, puedes elegir si hoy será un día especial... pero no hay manera de evitar el salto mortal de vivir. Y a veces esto supone quitarse la máscara y mostrarme tus pupilas derretidas.
Escrito por Cris a las 8 de Junio 2005 a las 09:24 PM